La movilización de jubilados que se realiza todos los miércoles frente al Congreso Nacional fue violentamente reprimida por las fuerzas de seguridad este miércoles, con el uso de gases lacrimógenos, palos y empujones con escudos para dispersar a los manifestantes. Como resultado, al menos dos personas fueron detenidas, y una mujer fue hospitalizada luego de desmayarse durante la protesta.
Numerosos jubilados fueron atendidos por irritación en la piel y los ojos debido a los gases. Nancy, una de las manifestantes, sufrió una descompensación y debió ser hospitalizada.
Las organizaciones de jubilados se concentraron, como cada semana, en el anexo del parlamento para exigir la revisión del veto a la reforma previsional y protestar contra los recortes en el acceso a medicamentos gratuitos del PAMI, entre otras demandas.
Un representante de la agrupación Jubilados Insurgentes relató que, a diferencia de otras semanas, la represión fue desmedida: "No nos permiten dar la vuelta, terminan reprimiendo. La vuelta nuestra es sencilla, damos la vuelta al Congreso, hacemos un par de semaforazos y nos vamos, pero no nos van a meter miedo", afirmó en declaraciones a Radio 10.
La movilización también contó con el apoyo de agrupaciones estudiantiles, gremios y legisladores como Myriam Bregman y Nicolás del Caño, del PTS/Frente de Izquierda. Bregman criticó la actuación del gobierno: "La situación es de absoluto descontrol, no tiene lógica. Patricia Bullrich quiere impedir esta protesta masiva, pero deberían estar buscando a los estafadores en la Casa Rosada, no reprimiendo a los jubilados". La diputada subrayó que "se ha perdido el miedo" y auguró que "la situación va a cambiar", asegurando que "más gente se animará a manifestarse".
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